Windows es un sistema operativo que, desde sus inicios, ha priorizado la protección del funcionamiento del sistema evitando que los usuarios realicen cambios que puedan afectar su estabilidad. Para evitar problemas, se han otorgado privilegios a ciertas cuentas, de modo que solo aquellos con el nivel más alto tienen acceso a realizar configuraciones dentro del ordenador.
Cambiando nuestro nivel de acceso
Para muchos usuarios, este tipo de tareas de mantenimiento son normales, pero resultan frustrantes cuando se tiene una cuenta estándar y se descubre que los movimientos están limitados en el ordenador. No puedes desinstalar aplicaciones no deseadas, ni instalar otras que necesites. Además, hay áreas restringidas y el administrador ha establecido horarios y limitaciones que interrumpen tu trabajo.
El primer paso será solicitar a un usuario administrador que cambie el rol de nuestra cuenta. Para hacerlo, debemos cerrar la sesión actual y volver a acceder al PC con ese nuevo usuario. A continuación, nos dirigimos al panel de control de Windows 10, el cual ofrece la función más accesible. Allí, seleccionamos «Cuentas de usuario» y se abrirá una nueva ventana.
En esta ventana, nos fijamos en la primera opción: «Cambiar el tipo de cuenta». Al seleccionarla, aparecerá otra ventana con todos los usuarios registrados en el ordenador y el tipo de perfil que tienen. Debemos elegir nuestra cuenta y verificar que sea del tipo «Estándar».
A continuación, accedemos a una pantalla específica donde aparece la información de nuestra cuenta seleccionada. Para cambiar el tipo de cuenta, pulsamos en «Cambiar el tipo de cuenta» y accedemos a otra ventana donde se muestran todas las alternativas disponibles. Simplemente seleccionamos el nuevo rol de «Administrador» para aplicar los cambios y obtener más libertad a la hora de realizar tareas de mantenimiento o gestionar aplicaciones.
Es importante recordar que para completar este proceso, debemos acceder con una cuenta de usuario administrador del PC. En el caso de no tener uno, no será posible realizar los cambios que afectan directamente al sistema operativo. Si en algún momento desea revertir los cambios y volver al estado original, puede realizar el mismo proceso y seleccionar el estatus original en el último paso.
