Asiento contable de un pagaré: Ejemplos y explicación paso a paso

asiento contable de un pagare

Con frecuencia, en el ámbito de la contabilidad empresarial, se produce confusión en cuanto a ciertos conceptos, como es el caso de los ‘pagarés’ y su correcta contabilización.

Los expertos de Ineaf recuerdan que un pagaré es un documento en el cual el emisor se compromete a pagar una cantidad determinada en un período de tiempo específico. En este documento se deben incluir elementos como la denominación de ‘pagaré’, el lugar y fecha de emisión, el nombre del beneficiario, el importe, el lugar y fecha de vencimiento, el número de cuenta y el código IBAN del emisor, así como la firma del mismo.

Es importante destacar que los pagarés pueden ser transferidos mediante un proceso conocido como endoso, donde este documento solo puede ser transferido a un tercero a través de una cesión de crédito. Para llevar a cabo esta transferencia, tanto el cedente, el cesionario como el firmante deberán otorgar su consentimiento.

En el momento de contabilizar un pagaré recibido de un cliente, este deberá ser registrado en la cuenta 431, correspondiente a clientes y efectos comerciales a cobrar. Por otro lado, si se trata de un pagaré emitido por un proveedor, la anotación se deberá realizar en la cuenta 401, destinada a proveedores y efectos comerciales a pagar.

En el caso de tener que contabilizar un endoso, se debe tener en cuenta que esto implica utilizar el pagaré pendiente como forma de pago. Si el pagaré se utiliza para cancelar una deuda con un proveedor, en la contabilidad deberá ser registrado en la cuenta 431 de clientes, efectos comerciales a cobrar, en el debe por el cobro pendiente de la venta, y en la cuenta 400 de proveedores, por el pago pendiente de la compra. De esta manera, cuando llegue el plazo de vencimiento del pago al proveedor, debido a la falta de liquidez, el empresario utilizará el pagaré como forma de pago.

En el caso de que el importe no coincida, la diferencia podrá ser saldada en efectivo, a favor o en contra del empresario, es decir, ya sea que el proveedor deba abonar la diferencia o que esta situación ocurra al revés. También es posible contabilizarla utilizando cuentas financieras.

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